Un viajero insólito y un universo para descifrar, en un relato en que la aventura y la paranoia se confunden (JLBelloq, Círculo del Ludófago)
Cosmo Ouroboros
por Sutter Cane
Llegué a las proximidades de Caronte tres mil cuatrocientos sesenta y dos días después de mi partida, a bordo de la “Principia”, y al borde del colapso mental, ya que el hombre no está preparado para largas estancias sin contacto humano. Para cuando mi misión llegaba a su término, descubrí un terrible fallo de cálculo que desarmó toda la esperanza que quedaba en mí, para construir por momentos un insufrible reloj mental de cuenta atrás en el que se aproximaba mi muerte. seguir leyendo