Cuentos del gato disecado (III)

por Pluma de Escarcha

El gato disecado

El gato disecado

Roe que te roe, roe que te roe…  

Una figura arrinconada mal formada, susurraba y se inclinaba mientras escudriñaba en una rendija en la pared.

De su espalda asomaba, entre harapos roídos por él mismo, una joroba de lo más escalofriante, de la que supuraba algo amarillento. Tenía los nudillos de las manos encallados, tanto que no era capaz de estirar los dedos totalmente: llevaba demasiado tiempo usando los puños para caminar. Caminar como una rata…

Krack, que se puso el nombre a sí mismo, seguía escudriñando a la que, con un nerviosismo cada vez más inquietante, movía las huesudas manos alrededor del agujero, intentando hacerlo más grande

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Cuentos del gato disecado (II)

por Sutter Cane

El gato disecado

El gato disecado

Fue como el flash de una fotografía que te hacen mientras estás dormido, como una bomba nuclear que explota mientras tú estás con los ojos cerrados en brazos de Morfeo, y de repente te despiertas con todo en plena calma, pero con esa sensación de que ha ocurrido algo de una contundencia cegadora.  Era como si hubiera explotado una bomba en el techo de la casa, sin haber provocado daños.

Raymond se incorporó de un salto temiéndose cualquier catástrofe y se asomó a la ventana. Todo estaba en plena calma. Era una noche tranquila y cálida de verano. Fuera los insectos nocturnos marcaban su ritmo, y la brisa mecía los campos en la tenue oscuridad. Acto seguido, subió al desván, en lo alto de la casa. Nada. Todo estaba en calma. seguir leyendo

Cuentos del gato disecado (I)

por Sutter Cane

El hombre del cable aparcó la furgoneta justo en frente de la casa, y tardó menos de un chasquido en saltar del vehículo enfundado en su mono azul y encaminarse hacia la puerta con la caja de herramientas en la mano. Atravesó el pequeño jardín bien cuidado, entró  bajo el porche y mientras se encendía un cigarrillo llamó al timbre de la puerta de aquella casa de dos pisos, de madera, estilo americano. Era una barriada de gente más bien acomodada, casas en hilera, barrio tranquilo. seguir leyendo