Una noche de juegos en un lugar con demasiada mala fama
Noche de lluvia en el convento San Juan de Dios
por J.L. Belloq
La noche no era demasiado fría. El aguacero la había convertido simplemente en desagradable. Sin embargo, a pesar de llevar las chaquetas pingando, en el fondo agradecíamos ese aporte natural a la ambientación. seguir leyendo